«Vivir» .
Lo susurras en mi oído y mi tristeza baila, se desboca… Pero insistes, te confabulas con mi mente para acallar un sentimiento que me asola y que me ahoga. No me miro. Golpeo con rabia la luna de cuerpo entero que escupe sin miramiento la nueva imagen que mi nombre ostenta. Me muerdo los labios y mi barbilla tiembla, ante ella y ante ti. Tu corazón de hombre aflora a tus ojos y sus destellos de amor me atraviesan. Pero... no aciertas a comprenderme, lo sé. Porque no puede calibrarse el dolor por la feminidad perdida cuando jamás se tuvo, cuando jamás se sintió.
Vivir… Percibiendo el vacío de unos senos de mujer ausentes, reducidos a cicatrices; de unos pechos de madre que ya no podrán alimentar una vida después de crearla… Dame tiempo. Segundos, minutos u horas…, días tal vez, para reconstruir mi mundo, para rehacerme a mí misma como aguerrida luchadora que soy. No temas. Viviré. Conquistaré horizontes nuevos a pesar del miedo y el dolor, y mis labios volverán a vestir sonrisas que no cesarán. Pero ahora déjame llorar. Permite que mis emociones se batan en duelo por lo que me arrebataron y no volverá.
© Pilar Muñoz - 2015
El tiempo tan necesario... Para llorar, para gritar... Y para después levantarte otra vez. Buenísimo, Pilar!
ResponderEliminarBesotes!!!
Muy bueno Pilar
ResponderEliminarPrecioso, a veces es muy difícil reconstruir ese mundo pero es cierto que sólo el tiempo es capaz de conseguirlo.
ResponderEliminarBesos