Hace un par de años, allá por mayo de 2015, y a través de la experiencia de una amiga escritora, supe de la iniciativa de «El libro viajero» que ya habían puesto en marcha, en más de una ocasión, en un grupo de Facebook llamado «Algo más que lecturas» y administrado por Fany Bm. Para quien no sepa en qué consiste tal iniciativa, explicaré -de forma resumida- que un escritor/a pone un ejemplar de su novela a disposición de la administradora del grupo para que todo aquel que desee leerla pueda hacerlo siguiendo una especie de cadena en la que cada uno de los participantes va remitiendo el ejemplar, tras haberlo leído, al siguiente participante de la lista, hasta que el último de ellos la devuelve nuevamente a las manos de su autor/a. Pero con un detalle que hace de este proceso algo muy especial: cada uno de los lectores deja impreso su comentario en el ejemplar para que su autor/a reciba, también de vuelta, las impresiones que la novela ha suscitado en quienes la han leído. Me pareció una idea tan bonita que quise participar; por recabar esas impresiones, por compartir una historia parida con esfuerzo, trabajo e ilusión y porque me parecía un tanto mágico que un libro estuviera danzando por la geografía española un tiempo indeterminado para terminar volviendo a casa con más de una decena de experiencias adosadas a sus páginas. Y cuando lo propuse, Fany me dijo que sí (vaya desde aquí mi agradecimiento por haberme permitido disfrutar de una vivencia literaria más).
Hoy ha llegado a casa, con las huellas de sus lecturas en él y con catorce impresiones inmortalizadas en sus primeras páginas, entre cuyas letras, palabras y frases pueden entreverse sensaciones, sentimientos y más de una emoción que me encanta no haberme perdido. Porque cuando una historia nace, corresponde a los lectores darles vida, y no hay nada más bonito que observar cómo crece arropada por la buena acogida de quienes la han tenido entre sus manos.
Cuando decidí escribir «¿A qué llamas tu amor?» y contar la historia de Jana, era muy consciente de estar creando una novela destinada a romper moldes, una novela intimista -de corte erótico- alejada del patrón habitual en este tipo de obras, por cuanto que no encumbra, a través del sexo, la relación romántico-pasional entre sus protagonistas (como ya es habitual en la mayoría de las novelas publicadas en estos últimos años dentro del género), sino que, por el contrario, viene a poner en tela de juicio esa relación e incluso al amor, tal y como este parece entenderse cada vez más. Era muy consciente de estar creando una novela que pudiera no tener los adeptos deseados por cuanto que huye de convencionalismos, estereotipos y tópicos de ficción para pasar a llamar a las cosas por su nombre, para hablar de realidades a través de una historia profunda y para bucear en la naturaleza y en la esencia del amor y de las relaciones de pareja por encima de ese montaje ficcional y utópico tan extendido. Porque puede ser AMOR lo que no lo parece; y no serlo aquello que creemos que SÍ lo es.
Quizás por eso he sentido un pequeño temor al recibir la novela de vuelta. No por el hecho de que no hubiera gustado, sino porque era mi máxima transmitir ese trasfondo que da sustento a la novela, que pone el sexo a merced de la historia y del mensaje que en ella se esconde. Y hacerlo, además, con la mayor elegancia posible.
Pero se ha disipado el temor nada más verla. Debo decir que me he sentido plenamente satisfecha al leer las impresiones de esas primeras páginas, porque he podido apreciar que las lectoras no se han quedado en la superficie, sino que han buceado en la historia para captar su esencia.
«... me has hecho pensar en cosas que doy por hechas y es que la vida, a pesar de la rutina, nunca deja de dar sorpresas.»
«Recién terminado y con lágrimas en los ojos, no me queda más que decir que en estas páginas hay mucho más que las palabras escritas.»
«Me ha encantado la historia de Jana, el mimo con el que está escrita y la novedosa forma de tratar una novela erótica.»
«...escrita con una elegancia exquisita.»
«No solo sexo y pasión. Hay mucho más en estas páginas.»
«...me ha enseñado que hay varias formas de vivir el amor...»
Esta es solo una pequeña muestra de esas impresiones, un extracto de algunas de ellas. No pongo los nombres de quienes las suscriben porque no deseo menospreciar a nadie, TODAS merecen la pena.
Gracias, M. Loreto, Nùria, Sara D.P., Brigit, Elisa Mira, Mary Tamayo, Maryam, Mari Benito, Arancha M., Arantxuki, Enma, Fany, Ana y Eva por haber vivido esta historia.
Una novela maravillosa, que se merece todos esos buenos comentarios. Bonita experiencia ha tenido tu libro.
ResponderEliminarBesotes!!!